Las manos son como una tarjeta de visita, están siempre a la vista y hablan mucho del cuidado personal de una persona. Del mismo modo, aunque con un poco menos de visibilidad, los pies bien tratados también son una señal de preocupación con el cuidado personal. Para muchos, las uñas son la parte más complicada en el cuidado de manos y pies ya que hacerse la manicura y la pedicura no es suficiente para lucir unas uñas impecables.
Las uñas deben cuidarse siempre y no solo por aspectos estéticos sino también por higiene y salud. En este aspecto, la negligencia puede pasarnos factura ya que aumentan considerablemente las probabilidades de aparición de infecciones u hongos. Asimismo, los especialistas recomiendan un cuidado constante de las uñas para evitar que se rompan, adquieran un color antiestético o se damnifiquen de alguna forma.
¿Cómo mejorar el aspecto de las uñas?
Con algunos pasos sencillos, es posible cuidar rápidamente las uñas y exhibir pies y manos con un aspecto más saludable y bonito. En la higiene diaria, no debemos olvidarnos de hidratar también esas dos importantes partes del cuerpo, dedicando un pequeño masaje alrededor de las uñas para mimar las cutículas y evitar que la piel se levante. Si lo que quieres es dejar de morderte las uñas aquí tienes unos cuantos motivos para dejar de morderse las uñas.
Una vez a la semana, es importante cortar y lijar las uñas para mantener una buena higiene y para evitar que se rompan. Los profesionales sanitarios no recomiendan la retirada de las cutículas, puesto que son la protección natural de las uñas. Lo más aconsejable es suavizarlas con cremas y empujarlas con la ayuda de una pequeña espátula. Al realizar tareas del hogar o cualquier tipo de actividad de bricolaje, jardinería, etc., es importante utilizar los guantes adecuados y, en algunos casos, calzados especiales para proteger pies y manos del contacto con productos químicos, tierra, herramientas, etc.
La alimentación también influye en el cuidado de las uñas
Además de cuidar la higiene de manos y pies, las uñas también necesitan de algunos nutrientes específicos para crecer fuertes y saludables. Para tener unas uñas sanas, es importante consumir alimentos ricos en zinc e hierro, como los mejillones, berberechos y otros moluscos. También se recomienda una dieta rica en ácidos grasos esenciales, selenio, proteínas y aminoácidos. Para echarle una mano la dieta, los especialistas también recomiendan el consumo de suplementos ricos en colágeno para fortalecer las uñas.