Comenzar a hacer ejercicio es una promesa que muchos se hacen y pocos cumplen. Realizar una actividad física no se trata solamente de tener el cuerpo perfecto para los días de verano, se debe realizar primordialmente para tener un estilo de vida saludable.

La fórmula básica para cuidar a nuestro cuerpo es una combinación de ejercicio y alimentación, si a esto se le agrega el consumo de los aminoácidos ramificados correctos, se obtendrán resultados que se verán reflejados de manera positiva, tanto en el aspecto físico como en el emocional.

¿Qué son los BCAAs?

Si estás buscando un suplemento alimenticio que complete tus jornadas de entrenamiento, los BCAAs son aminoácidos ramificados, compuestos por leucina, isoleucina y valina, que ayudan con el proceso de absorción de las proteínas y aceleran el metabolismo del cuerpo. Estas sustancias no las produce el organismo por sí solo, para obtenerlos se debe tener una dieta compuesta por alimentos y suplementos que proporcionen estos elementos para nuestro cuerpo.

bcaa consumo

Si has comenzado a cambiar tu estilo de vida por uno más saludable, estás pensando ir a un gimnasio y controlar tu alimentación, en cualquier momento vas a empezar a recibir sugerencias sobre complementos alimenticios y sustancias energéticas que te ayudarán en el proceso. Lo importante antes de comenzar a ingerir cualquier suplemento es conocer sus componentes y los factores en los que te pueden beneficiar.

Cómo incluir los BCAAs en la dieta

Ir al gimnasio y hacer abdominales no garantiza un vientre plano, trabajar para tener un cuerpo perfecto requiere de disciplina y constancia en el ejercicio y en la alimentación. Al realizar entrenamientos con frecuencia, sobre todo cuando se hacen ejercicios de fuerza, el cuerpo recurre al consumo de las proteínas en reserva que se encuentran en los músculos que genera la disminución de la masa muscular.

Si estás entrenando con la finalidad de desarrollar músculos, el consumo de los aminoácidos ramificados es uno de los suplementos más comunes para ver resultados de forma más rápida. La dosis diaria de BCAAs puede ir entre los 5 y los 20 gramos, esto dependerá del peso y la edad de la persona, y de factores como los hábitos alimenticios y el objetivo del entrenamiento que también influyen en el momento de decidir cuál es la dosis correcta para una persona. Lo más recomendable es que sea un nutricionista o un entrenador personal el que ofrezca las indicaciones justas para cada individuo.

El momento indicado para tomarla también dependerá del tipo de entrenamiento. Se debe ingerir antes del entrenamiento si el objetivo es tonificar el cuerpo, realizar ejercicios largos de resistencia o si se entrena en ayunas. La razón de esto es que son aminoácidos que el cuerpo absorbe muy rápido y al realizar este tipo de ejercicios es la energía inmediata que el cuerpo consume sin recurrir a las reservas que se encuentran en la masa muscular.

Si, en cambio, el objetivo es facilitar el crecimiento de la masa muscular, como es el caso de los fisioculturistas, o si se trata de deportistas de resistencia, lo más recomendable es el consumo de los BCAAs después del entrenamiento. La razón es que, como la función principal de estos aminoácidos es ayudar a la síntesis de la proteína muscular, si se toma después del ejercicio favorece el crecimiento del músculo.

Para las personas que realizan ejercicios con frecuencia, superior a tres veces a la semana, se recomienda un consumo diario; si la frecuencia es menor, será suficiente antes o después del entrenamiento. Lo importante es no superar la dosis diaria recomendada que viene indicada en el momento de la compra.

Para ver realmente los resultados de los BCAAs, su consumo debe estar acompañado de una dieta baja en calorías, y se debe tomar abundante agua. No son pastillas milagrosas que nos harán perder grasa y tener el cuerpo perfecto si no se trabajan todos los aspectos en conjunto.

Principales beneficios

Los mayores beneficios del consumo de estos aminoácidos son que evitan la pérdida de la proteína muscular, aportan energía inmediata al cuerpo y retrasan la sensación de cansancio en los entrenamientos prolongados. Finalmente, ayudan con la protección de los tejidos y la recuperación muscular.

No olvides que antes de comenzar a tomar cualquier suplemento alimenticio lo más recomendado es consultar con un nutricionista que te aporte las indicaciones apropiadas según las condiciones de salud y los objetivos que deseas alcanzar. La finalidad no debe ser sólo verse bien, sino sentirse bien.