Los principales problemas sexuales masculinos con los que nos encontramos más a menudo, suelen ser de origen psicológico u orgánico. Del mismo modo, podrán ser ocasionales o permanentes en la persona. Si bien es cierto, a día de hoy este problema tiene varias soluciones, consiguiendo solventarlo hasta en el 98% de los casos.

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¿Cómo se puede tratar?

Primeramente se debe de realizar un diagnóstico, indicando si son factores orgánicos o psicológicos. Por ejemplo, si tenemos problemas para conseguir la erección durante la práctica sexual pero amanecemos con erecciones involuntarias, seguramente no sea un problema orgánico, si no psicológico.

Por ello, podemos decir que dependiendo del origen del problema, se plantearán unas soluciones u otras.

¿Cuáles son los problemas sexuales más comunes?

De acuerdo a un estudio realizado por la clínica online 121doc, nos topamos con tres problemas sexuales que se dan en mayor proporción en el género masculino. Estos son, la eyaculación precoz, la falta de deseo sexual y la disfunción eréctil.

Eyaculación precoz

Como su nombre indica, la eyaculación precoz evita que el hombre pueda controlar voluntariamente el reflejo eyaculatorio. Alcanzando el orgasmo tras un corto periodo de excitación.

Normalmente, ante este tipo de problemas se suelen recomendar un medicamento que consigue retardar o eliminar el problema. El pronóstico de hombres con eyaculación precoz es bastante notable, consiguiendo solucionar este problema con ciertas terapias sexuales o incluso con un psicólogo o sexólogo.

Falta de deseo sexual

El siguiente problema sexual más común en los hombres, suele ser la falta de deseo sexual. A este problema también se le conoce como deseo sexual inhibido. El hombre no presentará ninguna respuesta de satisfacción ante los estímulos sexuales por parte de la pareja.

Suele darse en casos en los que el hombre no tiene complicidad o no se siente cercano con su pareja. Al contrario que en otros problemas, la falta de deseo sexual no se soluciona mediante el consumo de medicamentos, si no que precisa de terapias sexuales y hasta incluso psicológicas. También es común realizar terapias de pareja para hablar y expresar las fantasías de cada uno.

Disfunción eréctil

La llamada “impotencia” o disfunción eréctil, es otro de los problemas sexuales masculinos más comunes. La DE (disfunción eréctil) presenta dificultades para mantener o lograr una erección, siendo una enfermedad más común a medida que se envejece. Pero esto no quiere decir que la disfunción eréctil sea algo natural del envejecimiento, ni mucho menos.

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Normalmente, en estos casos se suele recetar la ingesta de una pastilla diaria, realizar ejercicio físico, dejar atrás los malos hábitos (fumar y beber) y hacer una dieta equilibrada.

Si crees que presentas problemas de disfunción, debes comunicárselo a tu médico de inmediato, podría tratarse de una lesión nerviosa y hasta incluso que los vasos sanguíneos estén colapsados.