A la hora de evaluar la opinión de los estudiantes con respecto a las formaciones que han cursado, uno de los aspectos en los que se es más crítico es el exceso de teoría en el plano curricular. Es una realidad que los alumnos disfrutan con los contenidos prácticos de las asignaturas y además, se considera la mejor forma de prepararse para lo que les espera una vez den el salto al mundo laboral. El sector IT, que podríamos definir en grandes rasgos como la unión de las tecnologías de la información y la comunicación, es uno de los sectores que más destaca por basar su programa de enseñanza en este concepto revolucionario: el learning by doing. Llevar a cabo un curso de desarrollo web full stack o realizar un bootcamp en programación se complica notablemente de no utilizar este sistema formativo y es, precisamente por eso, por lo que las distintas escuelas formativas tienen cada vez más en cuenta la aplicación de este concepto revolucionario.
El desarrollo y la programación web, por ejemplo, es una disciplina compleja que sería difícil impartir si los estudiantes no participaran del proceso de aprendizaje, poniendo en práctica lo aprendido e, incluso, lo que queda por aprender. El Learning by doing, como su propio nombre indica, consiste en aprender haciendo, equivocándose y en definitiva, adelantando casos reales del mundo laboral. Por supuesto, adquirir los conocimientos teóricos en cualquier rama de conocimiento sigue siendo imprescindible, no es posible ni aconsejable eliminarlos al 100%, y la diferencia está en saber desde el principio para qué se utilizan, cuál es su función práctica y por qué es necesario conocerlos. A partir de ahí: practise, practise, practise.
El ejemplo de aprender haciendo: los bootcamps
Existe un amplio abanico de opciones disponibles, pero sin duda el bootcamp en programación y desarrollo web o el de otras disciplinas como pueden ser el big data o el hacking ético, suelen ser los más claros representantes del aprendizaje práctico. Los bootcamps son centros de aprendizaje intensivo en donde, portando el learning by doing por bandera, es posible convertirse en un profesional de materias tecnológicas como las mencionadas anteriormente. En determinados bootcamps, es posible adquirir las capacidades de un perfil junior en tan solo 3 meses y, al mismo tiempo, estar listo y capacitado para desembarcar como empleado en una empresa. Sin una metodología eminentemente práctica, alcanzar este nivel en tan poco tiempo sería poco menos que una quimera.
ID Bootcamps imparte cursos en Madrid en Data Science y Machine Learning, Programación y desarrollo web Full Stack, Ciberseguridad y hacking Ético, DevOps o Diseño UX/UI. Además, cuenta con modalidad Full-Time (450 horas repartidas en 3 meses) y también Part-Time (las mismas horas distribuidas en 9 meses y con un horario más accesible para profesionales). En ID Bootcamps cuentan siempre con profesionales en activo como profesores y el modelo de asistencia puede variar desde el presencial al online, según la disponibilidad diaria del alumno. Sin duda, una de las mejores opciones de formarse para orientar la carrera laboral de alguien hacia el sector tecnológico.